HOMENAJE A MARÍA DE LOS ÁNGELES INFANTE
“Cuando hablo de mi padre me salen las palabras, los sentimientos, a borbotones (...). Siempre he dicho que, aunque no hubiese sido hija suya, le hubiese admirado intensamente conociendo su vida, su forma de ser, noble y abnegada, y esa preocupación constante por todos y por todo”, recordaba María de los Ángeles en 1977 cuando aún estaba casi todo por hacer. Titánica fue su lucha para reivindicar el legado olvidado de Blas Infante durante la dictadura franquista. Al igual que su padre, nunca perdió la firmeza y el sentido de la responsabilidad ante las dificultades. Personalmente no llegué a conocerla, pero admiro su vida, su lucha y su compromiso por Andalucía. Con tan solo seis años se lo quitaron, nos lo quitaron. “Ya sabes padre que nunca más volví a celebrar mi día, porque unos hombres de camisa azul y pantalón negro acabarían con la paz y la esperanza viva de nuestras vidas”. A pesar de haber padecido tan pequeñita esta profunda herida en su alma, la presidenta de esta Fund