NEGACIONISTAS DE LA VIDA
En mi último viaje a Sevilla visité la antigua cripta del Templo de la Anunciación, que acoge el Panteón de sevillanos ilustres. Se accede por la Facultad de Bellas Artes en cuyo antiguo claustro, que fuera residencia jesuítica, se abre una monumental puerta renacentista del arquitecto cordobés Hernán Ruiz II. Dos tramos de escaleras conducen a la antigua cripta de los jesuitas. Busqué el sarcófago realizado en piedra y de estilo renacentista de Benito Arias Montano. Un gran humanista del siglo XVI que compaginó diferentes estudios e investigaciones: filología semítica y clásica, filosofía y teología, biología y medicina, matemáticas y física. Aunque nació en tierras extremeñas en 1527, Frenegal de la Sierra, vivió y se formó en Sevilla, ampliando sus conocimientos en Alcalá de Henares. Su pasión por el estudio de las Sagradas Escrituras le condujo, ya como sacerdote, a retirarse a Alájar (Huelva). Su nivel académico le llevaría a participar en el Concilio de Trento.