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HITOS ANDALUCISTAS EN CÓRDOBA

             Recordar y conmemorar son acciones muy importantes para el desarrollo y madurez de un pueblo. Andalucía es una de las autonomías pertenecientes al grupo de las nacionalidades como Cataluña, País Vasco y Galicia. El pueblo andaluz puesto en pie el 4 de diciembre de 1977 consiguió este reconocimiento, causando el acceso al proceso autonómico por el artículo 151 de la Constitución.   Esto no fue un regalo del Gobierno sino la lucha del pueblo. Merece la ocasión recordar algunos de los hitos históricos del andalucismo en nuestra ciudad. El Pacto Federal andaluz se constituyó en Córdoba, el 10 de junio de 1869, en el salón de la Fonda Suiza , ubicada en la actual plaza de las Tendillas. Tuvo como origen la Revolución de 1868, llamada  la Gloriosa,   cuyo caldo de cultivo se debió a un pueblo gravemente lesionado por el poder ejecutivo favorecedor de la oligarquía y la corrupción. Las sesiones del Pacto Federal andaluz culminaron el 12 de junio de 1869 con la firma de dicho

DESINMATRICULACIÓN DE LA MEZQUITA ¡YA!

La grandiosa y bellísima Mezquita de Córdoba es el resultado de cuatro etapas constructivas bajo la dinastía Omeya a lo largo de dos centurias. Durante la época andalusí esta Mezquita-Aljama o de los Viernes fue el centro   de la vida religiosa y social de la capital de al-Ándalus durante quinientos años. A partir de 1236, cuando Córdoba fue conquistada por el rey Fernando III,   la Mezquita de Córdoba, convertida en la joya de la corona de Castilla, sobrevivió, no corriendo la misma suerte el resto de las mezquitas-aljamas de al-Ándalus. Hasta finales del siglo XV la Mezquita de Córdoba, a excepción de la Capilla Real, no había sufrido ningún tipo de nuevas construcciones que hubiesen afectado a su grandiosa fábrica. Según las crónicas, hasta la misma reina Isabel la Católica se negó a derribar parte de la Mezquita para construir la Catedral, siguiendo el espíritu conservacionista que habían mantenido los Trastámara a lo largo de su dinastía. Sería Carlos V quién autorizase la nueva

OBISPOS CON GUADAÑA

  La simbología de la cruz solo debería utilizarse para unir y crear fraternidad en nombre de Cristo. Sin embargo, muchas veces a lo largo de la historia se ha invocado a ella para dividir, excluir, matar, bendecir armas, abrazar a dictadores, provocar sufrimientos físicos y psíquicos, enriquecerse en nombre de lo más sagrado, etc. En definitiva, lo que debería ser un símbolo de libertad se ha manipulado y convertido en un símbolo diabólico. Hace unos días el Ayuntamiento de Aguilar de la Frontera (Córdoba) retiró una cruz , en aplicación de la Ley de Memoria Histórica y Democrática, ya que se erigió como homenaje a los “caídos” franquistas en la Guerra Civil. Ante esta decisión, el obispo de Córdoba, Demetrio Fernández, declaró en tono amenazante: ¡Ojo con tocar los sentimientos religiosos (refiriéndose a la cruz)!, ¡que nadie los toque, o si los toca, que se atenga a las consecuencias! Los cristianos no somos violentos pero tomamos nota”. Este obispo sigue la pauta de los preconci

CÓRDOBA, EN ESPERA

  Entramos en un nuevo año y las cifras siguen siendo desfavorables para Córdoba. Si hacemos un estudio de la población (INE, 1 de enero 2020), Córdoba es la capital con más de 300.000 habitantes que menos ha crecido, con solo un 0.1%. Madrid y Barcelona se llevan el ranking con el 2.1% y 1.7%, respectivamente, seguidas por Palma de Mallorca (1.6%), Murcia (1.3%), Bilbao y Zaragoza (1%), Alicante (0.8%), Valencia y Málaga (0.7%), Sevilla (0.4%) y Las Palmas de Gran Canaria (0.3%). Si tenemos en cuenta las capitales andaluzas, excepto Cádiz y Jaén, que ha decrecido su población, el resto alcanzan mejores resultados que Córdoba. La capital almeriense crece un 1.4%, seguida por Málaga (0.7%), Granada (0.5%), Sevilla (0.4%) y Huelva (0.2%). Incluso Lucena, la población con más habitantes de la provincia, ha crecido un 0.3%. ¿Qué le pasa a Córdoba, que abarcando un área de influencia comercial cercano al millón de habitantes, considerando municipios colindantes con su provincia, no es cap

ANDALUCÍA, MALTRATADA POR LOS BORBONES (II)

La revolución política que trajo la Gloriosa de 1868 quedó definitivamente frustrada con la instauración de la monarquía. La Restauración, con la llegada de Alfonso XII, un período de oligarquía y caciquismo, se basó en los cuatro pilares ideados por Cánovas del Castillo : Rey, Cortes, Constitución y  Turno  (propuesta de alternancia pacífica entre dos partidos). Éste último facilitó el bipartidismo con la participación de dos grandes formaciones: el  Partido Conservador  de Cánovas y el  Partido Liberal  de  Sagasta . Estos partidos se fraccionaron a la muerte de sus líderes. El sistema creado por la llamada Restauración fue  oligárquico  y  centralista . La  Iglesia  ganaría aún más poder económico, ideológico (controlaba una gran parte de la educación) y social, con lo que el Estado español se convertía en un férreo Estado católico. Al mismo tiempo, Alfonso XII residía en el Alcázar sevillano, enamorándose de María de las Mercedes, hija del duque de Montpensier, ajeno a la pobr

EL DÍA A DÍA, UNA DURA REALIDAD

Córdoba padece una grave bipolaridad. Por una parte, presenta síntomas de ser una ciudad con unos niveles de vida medios o altos, y, por otra, manifiesta una depresión social, afectando a miles de habitantes que viven en barrios   con altos índices de empobrecimiento y exclusión social. Son precisamente las mujeres de estas capas sociales las que más buscan empleo para mejorar la situación de sus familias, mujeres trabajadoras, verdadero motor de su unidad familiar. Por su bajo nivel formativo, sus principales ocupaciones se ciñen al cuidado y a la limpieza, empleos muy sacrificados, poco reconocidos y mal remunerados. Empleos precarios que no entienden ni de días, ni de horas, y que exigen una disponibilidad total, de lunes a domingo y mañana, tarde o noche. La mayoría de estas mujeres malviven, manteniendo a sus familias con menos de 500 euros al mes. Las menguadas pensiones de los/as abuelos/as de estos barrios suponen algo de respiro para ellas. Junto al grave problema del desemp

ANDALUCÍA, MALTRATADA POR LOS BORBONES (I)

  Desde la conquista castellana la gobernanza de tres dinastías reales (Trastámara, Austria y Borbónica) ha sido especialmente nociva para Andalucía. Con la conquista castellana Andalucía cambió radicalmente su historia. Sus más de dos mil años de esplendor, protagonizados por sus diferentes culturas tartésica, turdetana, bético-romana, bizantina, arábigo-andalusí, quedaron reducidas a los restos arqueológicos del subsuelo, a sus monumentos más sobresalientes, a la forma de hablar de su pueblo y a la   memoria, sometida al pretendido olvido por los nuevos colonizadores, intentando borrar uno de los mayores acervos culturales de toda la cuenca del Mediterráneo.   Fue a partir de los Reyes Católicos cuando el curso de la historia comienza a torcerse con más virulencia. Muy pronto toda la Península Ibérica quedaría bajo el poder unísono y centrípeto de la corona, objetivo que alcanzaría la máxima expresión bajo la dinastía borbónica.   La España que vivimos y sufrimos hoy no proviene, c